Hace unos días unos amigos estaban hablando de comida italiana y de que querían comer gnocchis (o ñoquis), y me antojaron, así que me puse en la búsqueda de una receta que pudiera hacer en mi casa. Lleva un poco de tiempo, pero es realmente muy sencilla de hacer.
1 taza de harina
1 yema de huevo
Sal
Nuez moscada (si deseas)
En la zona en la que deseas trabajar, esparce harina. Espera hasta que el puré esté a una temperatura manejable, pero aún algo caliente y forma con él una masa que colocarás sobre el área enharinada. Haz un hueco en el medio (como si fuera un volcán) y coloca allí la yema de huevo, la sal al gusto y la nuez moscada si deseas.
Mezcla con las manos y una vez listo, comienza a mezclar con la taza de harina poco a poco, estará lista cuando ya no se quede pegada a tus dedos y sus consistencia sea suave pero compacta. Haz de la masa una bola y deja reposar por 15 minutos.
Mientras la masa reposa, pon a hervir el agua en la que calentarás los gnocchis.
Pasado ese tiempo, ve tomando pedazos de la masa y estíralos sobre la superficie enharinada, cuando el grosor sea aquel en el que quieras los gnocchis, usa un tenedor para cortar la masa en el tamaño que deseas. Normalmente me salen unos 10 a 15 gnocchis de cada tira.
Para darle mejor forma, vuelve una bolita cada pedacito y aplástalo un poco con un tenedor para darle la forma típica.
Cuando hayas acabado, lanza los gnocchis en el agua hirviendo. Yo los lancé de 15 en 15 y de manera individual para que no se pegaran en el fondo. Estarán listos una vez que floten.
Ahora solo tienes que disfrutarlos con la salsa de tu preferencia.
Ingredientes: (para 2 personas)
2 patatas grandes1 taza de harina
1 yema de huevo
Sal
Nuez moscada (si deseas)
Preparación:
Colocas en una olla de agua hirviendo las 2 patatas, peladas y picadas en trozos grandes y esperas hasta que ablanden por completo (puedes probar usando un tenedor). Cuando estén listas, las retiras del agua y utilizando un tenedor o un utensilio para preparar puré, las machacas por completo hasta que tienen la consistencia de puré .
En la zona en la que deseas trabajar, esparce harina. Espera hasta que el puré esté a una temperatura manejable, pero aún algo caliente y forma con él una masa que colocarás sobre el área enharinada. Haz un hueco en el medio (como si fuera un volcán) y coloca allí la yema de huevo, la sal al gusto y la nuez moscada si deseas.
Mezcla con las manos y una vez listo, comienza a mezclar con la taza de harina poco a poco, estará lista cuando ya no se quede pegada a tus dedos y sus consistencia sea suave pero compacta. Haz de la masa una bola y deja reposar por 15 minutos.
Mientras la masa reposa, pon a hervir el agua en la que calentarás los gnocchis.
Pasado ese tiempo, ve tomando pedazos de la masa y estíralos sobre la superficie enharinada, cuando el grosor sea aquel en el que quieras los gnocchis, usa un tenedor para cortar la masa en el tamaño que deseas. Normalmente me salen unos 10 a 15 gnocchis de cada tira.
Para darle mejor forma, vuelve una bolita cada pedacito y aplástalo un poco con un tenedor para darle la forma típica.
Cuando hayas acabado, lanza los gnocchis en el agua hirviendo. Yo los lancé de 15 en 15 y de manera individual para que no se pegaran en el fondo. Estarán listos una vez que floten.
Ahora solo tienes que disfrutarlos con la salsa de tu preferencia.
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